¿Cuánto Puede Ver?


Por Gloria Rodríguez-Gil 

Introducción 

Muchos niños que son sordo-ciegos no son completamente ciegos, ya que tienen visión funcional que pueden usar. Entonces, para muchos niños la pregunta importante es ésta: ¿cuánta visión tiene el niño? Desde mi punto de vista, aun los mejores exámenes de visión no pueden ofrecer una respuesta completa. Ud. va a tener que observar el funcionamiento visual del niño con mucho cuidado mientras realiza las actividades típicas durante el día. Estas observaciones van a tener que abarcar diferentes ambientes, bajo diferentes condiciones de iluminación, cuando el niño esté funcionando lo mejor posible (por ejemplo, después de haber dormido bien toda la noche) y también cuando esté cansado o cuando se sienta mal (por ejemplo, después de haberse quedado despierto mucho tiempo en la noche).   

Las diferentes personas en el equipo educativo del niño lo van a observar en diferentes momentos durante el día, entonces la información reunida de todas estas personas puede contribuir a un perfil mejor y más completo del funcionamiento visual verdadero del niño, pero aun con la mejor recopilación de información sobre la visión del niño, no siempre podemos saber exactamente lo que él puede ver. ¿Cómo sabemos si está usando la visión solamente cuando percibe algo? ¿Cómo podemos aislar esta única avenida de los sentidos cuando sabemos que la percepción es tan compleja? Los ojos son parte de todo el cuerpo, el cual reúne e integra información sobre el ambiente de diferentes fuentes de información. Además, esta información de los sentidos está filtrada por nuestra mente , por nuestra personalidad, por las experiencias y las preferencias, etc. 

Entonces, es difícil medir únicamente la visión funcional por la misma razón que es difícil aislar la visión y el acto de ver del resto de la percepción. Una persona percibe las cosas a través de los sentidos individuales, la percepción en sí misma es una acumulación de información, una comprensión compleja de la realidad en que toda la información de los sentidos es automáticamente sintetizada e interpretada. 

Entonces, cuando el niño está viendo algo, ¿cuánta visión está usando realmente? ¿Está usando más el sentido del olfato? ¿Está viendo más a través de las vibraciones?  ¿Está percibiendo algo a través de la persona que lo está acompañando? ¿El lugar dónde está? ¿La hora del día? Puede ser que en realidad, la visión sea una combinación de todo esto y más. 

Las Historias de Adrian y Nathan 

Adrian 

El primer niño que voy a describir es uno de mis exalumnos,  lo voy a llamar Adrian. Adrian nació sordo y también tenía algunos problemas de la visión que no eran significativos en ese momento, y aprendía del mundo principalmente a través del sentido de la visión. Cuando tenía cinco años de edad recibió un implante coclear y, durante años de mucho trabajo, aprendió a usar la audición y también aprendió a hablar. A la edad de ocho años empezó a perder la visión hasta el punto en que no podía ver nada. Con ayuda de una intervención médica, recuperó una parte de visión y luego hubo un período en el cual su visión variaba mucho. Durante ese tiempo, fue muy difícil para él aceptar el hecho de que además de la pérdida auditiva con la cual nació, también tenía problemas de visión. 

Cuando llegó a los diecisiete años de edad, la visión de Adrian se había estabilizado y él podía reconocer y hablar sobre el hecho de que era sordo-ciego. Yo lo entrevisté durante este período y me pudo decir que no tenía visión en el ojo izquierdo y que solamente tenía visión de túnel en el ojo derecho. Con este nivel de visión, podía leer la letra impresa agrandada con alto contraste usando un CCTV o una computadora bajo condiciones de iluminación óptimas, y podía escribir mensajes en el teléfono celular si se lo acercaba mucho al ojo bueno, también empezó a usar un bastón blanco para desplazarse en lugares no conocidos. 

Lo que era muy sorprendente sobre Adrian es que las personas que no lo conocían nunca hubieran podido adivinar que tenía tan poca visión, realmente podía hacer muchas cosas tales como mantener el contacto visual cuando estaba hablando con las demás personas y desplazarse, casi como si pudiera ver todo. Pero lo que era todavía más interesante es que los doctores especialistas en los ojos de Adrian no sabían como podía usar su visión tan eficazmente como lo estaba haciendo. Según los especialistas, las retinas de Adrian estaban muy dañadas, tanto que no podría hacer las cosas que realmente estaba haciendo con la visión. La única explicación que tenían era que en ese momento el cerebro de Adrian recordaba todo lo que había visto a través de los años y no quería dejar de verlo. En el caso de Adrian, la única razón por la cual entendimos lo que estaba viendo era porque él podía decirnos exactamente lo que estaba viendo, a pesar de la enorme complejidad de su visión y percepción. 

Nathan 

Nathan nació con el Síndrome CHARGE y en ese momento los doctores especialistas de los ojos reportaron que Nathan no tenía visión en el ojo izquierdo y muy poca en el ojo derecho. Los padres de Nathan me explicaron que él podía ver solamente a través de una pequeña área en la retina del ojo derecho que todavía estaba fija. 

Como bebé Nathan tenía mucho interés en ver todas las cosas, miraba los rostros de sus padres y de los maestros cuando lo tenían sobre sus piernas, miraba los juguetes directamente delante de él y se los acercaba directamente delante de los ojos y de la frente. (Le gustaba sentir las cosas con la frente), y le gustaba ver a través de los juguetes que tenían hoyos.  

Cuando empezó a moverse independientemente alrededor de la casa, buscaba a las personas, lugares y objetos que quería encontrar, le gustaba mucho una mecedora que podía mover con los pies. Luego en las clases para preescolares, podía reconocer objetos y entender el uso y significado que tenían. En ese momento no sabíamos si podía o no reconocer fotos hasta el día en que puso una foto de él mismo de cabeza en una pizarra de fieltro y—dándonos una gran sorpresa—la volteó para ponerla correctamente. 

Yo me imagino que en el caso de Nathan, él tiene una parte de la retina que sí funciona con todas las células conectadas con el cerebro a través del nervio óptico y su cerebro está tomando la máxima ventaja de cada conexión con esta pequeña parte de la retina. Es importante recordar que Nathan también tiene una pérdida auditiva de moderada a severa y, si alguna vez usted ha tenido una venda en los ojos y ha usado tapones en los oídos al mismo tiempo, puede saber como los otros sentidos inmediatamente incrementan sus capacidades para compensar la pérdida de la visión y de la audición. No me sorprendería si el funcionamiento visual de Nathan también está funcionando mejor debido a la pérdida de audición. 

Conclusiones

¿Cuánta visión tiene el niño? Posiblemente no tengamos una respuesta bien clara a esta pregunta. La visión es tan compleja como el cerebro humano mismo. Pero si usted observa a un niño con mucho cuidado y muy de cerca, va a descubrir algo sobre su visión y sobre la manera en que él realmente ve. Obtener esta información es una parte crucial para ayudar al niño a tener acceso al mundo que le rodea.

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