Compartir Información para Mejorar las Experiencias de Aprendizaje de su Niño en la Escuela: Estrategias para familias desde el punto de vista de un maestro

por Gloria Rodríguez-Gil, Especialista en Educación de CDBS


Las familias tienen muchas razones importantes para compartir información básica de sus hijos con el personal del salón de clase y con las otras personas que ofrecen servicios en la escuela.  Algunas de estas razones incluyen: ayudar a los niños a funcionar lo mejor posible para facilitar el aprendizaje, reducir el tiempo que las personas que ofrecen servicios invierten para llegar a conocer a los estudiantes para iniciar trabajo en metas educativas, y facilitar las relaciones colaborativas con proveedores de servicios desde el principio.

Para empezar, permítame compartir una historia reciente sobre mis visitas a diferentes lugares de California.  Tres semanas después de que el año escolar empezó, visité una clase preescolar para observar a una alumna a la que voy a llamar Sophie.  El día empezó con el desayuno de los alumnos con ayuda del personal docente.  Una de las opciones este día era un bagel con queso crema, y una asistente del salón de clase cortó el bagel en pedacitos para Sophie.  La asistente tomó un pedazo del bagel con un tenedor y se lo ofreció a Sophie, poniéndolo delante de su cara a una distancia muy cerca para que lo viera (Sophie tiene baja visión).  Ella respondió negándose a abrir la boca.  Yo le pregunté a la asistente del salón de clase si a Sophie le gustaban los bagels y ella respondió diciendo que no sabía lo que le gustaba comer a Sophie.  Luego la maestra me explicó que Sophie solamente había estado en la escuela tres semanas.

Mientras la asistente estaba cortando el bagel en pedazos, recuerdo que me pregunté a mi misma si esta alumna en particular realmente podría comer algo como un bagel, aun cuando estaba cortado en pedazos chiquitos.  Sophie tiene desafíos motores significativos y camina con una andadera, además, tiene problemas de audición y se comunica principalmente usando conductas y acciones (auque puede imitar algunas palabras cuando está muy motivada, algo que demostró posteriormente durante la observación).  Ya que no se pudo comunicar oralmente, me di cuenta de que algunas de sus habilidades para comer—particularmente para masticar—posiblemente estén afectadas por la falta de desarrollo en las habilidades orales-motoras.  La posibilidad de que Sophie pudiera masticar y tragar algo tan duro como un pedazo de bagel parecía muy baja.  Finalmente, la actividad del desayuno no fue una experiencia positiva ni constructiva para Sophie.

La experiencia del desayuno posiblemente hubiera sido más positiva si la familia de Sophie y el personal de la escuela hubieran hablado antes sobre sus preferencias, hábitos y necesidades relacionadas con la comida.  Con una información más amplia compartida entre la familia y el personal, es posible que no hubieran visto a Sophie como una niña indispuesta o una niña que no puede entender ni responder apropiadamente.  Aunque esta situación está relacionada específicamente con Sophie y con su programa, es un ejemplo de algo que es muy común, y afecta a los alumnos cuando la información básica no ha sido comunicada claramente en el momento apropiado.

Los profesionales y para-profesionales que trabajan con su hijo—especialmente cuando acaba de entrar al programa—posiblemente no van a entender las necesidades básicas de su hijo ni otra información importante porque su información está basada solamente en observaciones breves del salón de clase.  Los conocimientos que Ud. tiene de su hijo están basados en mucha experiencia personal y algunas cosas que son muy obvias para Ud., posiblemente no sean tan obvias para el personal de la escuela que le ofrece servicio a su hijo.  Es posible que haya reportes escritos sobre su hijo, pero estos reportes no ofrecen una idea completa de quien es realmente su hijo en la vida diaria, además no todo el personal que le ofrece servicios a su hijo tiene un acceso fácil a estos reportes.  Desafortunadamente, por haber ofrecido información sobre su hijo una vez no quiere decir que Ud. no tenga que ofrecerla muchas veces más.  Esto va a ocurrir particularmente cada vez que su hijo entre a un programa nuevo o empiece a trabajar con personas nuevas, y es posible que vaya a tener que repetir la información varias veces a las mismas personas para que la entiendan completamente de la manera apropiada.

En muchos casos, es difícil para los niños que tienen pérdida de visión y audición, además de discapacidades múltiples, hablar sobre si mismos con otras personas.  Generalmente es responsabilidad de los miembros de la familia y de otros adultos que cuidan a estos niños y conviven con ellos, compartir esta información para que los equipos educativos puedan proponer y diseñar actividades de instrucción basadas en las áreas fuertes y en las necesidades de los alumnos.  Ud. puede asegurarse de que esta información sea compartida si toma en cuenta algunas estrategias simples.  Es posible que estas estrategias se apliquen más a un alumno que acaba de entrar a un programa.

¿Quién es el niño? 

Ud. quiere empezar ofreciendo una imagen positiva de su hijo (por ejemplo, cómo es como persona, su personalidad, las cosas que hace bien y las cosas que le gustan o no le gustan hacer.  Esta información les va a ayudar a las personas que le ofrecen servicios a diseñar actividades basadas en sus preferencias y en sus áreas fuertes.  Desde este punto inicial, ellos van a poder desarrollar grupos de actividades que gratifiquen al alumno y que gradualmente le ofrezcan más desafíos.  La información sobre las cosas que no le gustan también les dará a las personas que le ofrecen servicios una información importante sobre las actividades que son difíciles para su hijo para que ellos identifiquen estrategias para enfrentar estos retos o encuentren maneras de resolverlos de otra forma.  Algunas veces lo que no le gusta al niño es debido a la falta de experiencia o por problemas físicos o neurológicos.

Consideraciones:

1.  Ayudar al personal que le ofrece servicios a conocer la personalidad de su hijo les va a dar la oportunidad de verlo como la persona que es, mas allá de sus discapacidades.

2.  Cuando Ud. ofrezca información sobre los gustos de su hijo, intente dar ejemplos específicos de cosas, personas, actividades y lugares.

3.  Las cosas que su hijo puede hacer bien pueden ser grandes o chicas, cosas que él puede hacer independientemente o en las cuales necesita ayuda, y posiblemente sean cosas en las cuales necesite apoyo total, pero que provocan una respuesta positiva o hacen a su hijo feliz.

El Diagnóstico

Si Ud. tiene el diagnóstico de problemas de visión y audición de su hijo, ofrézcales esta información a las personas que le dan servicio.  Muchas causas de la sordo-ceguera son poco comunes, y es probable que no todo el personal que le ofrece servicio vaya a conocer y a comprender las características e implicaciones de este diagnóstico.  Además, hay diferencias especificas entre los niños con el mismo diagnóstico, entonces es importante ofrecer información de como las características específicas del diagnóstico se manifiestan o no en su hijo.

Consideraciones:

1.  ¿Hay un sitio en el Internet u otro recurso que le guste particularmente a Ud.? Uno que piense que le ofrece información sobre el diagnóstico de su hijo de tal manera que sea fácil de entender para los demás.  Si es así, comparta esta información con el equipo de su hijo sobre el acceso a este recurso.

2.  Es posible que Ud. vaya a oír generalizaciones sobre su hijo—basado en un diagnóstico—que parece que no corresponden a su hijo ni a su situación específica.  Si esto pasa, hay que explicarles la diferencia entre su hijo y otros niños con un diagnóstico semejante, esto les ayudará a los demás a entender mejor estas diferencias.

Pérdida de la Visión y Audición, y de los otros Sentidos

Nosotros reunimos información y tenemos acceso al mundo a través de los sentidos.  Cuando los dos sentidos primarios (es decir la visión y la audición) para reunir información están reducidos o distorsionados, Ud. debe animar a su hijo a que haga el mejor uso posible de estos sentidos.  Puede usar los restos de la visión y la audición en combinación con los otros sentidos, tales como el tacto y el olfato para que el niño tenga tanta información como sea posible.

Consideraciones:

1.  Ofrézcales a los miembros del equipo educativo de su hijo toda la información médica disponible y los resultados de su hijo en las evaluaciones de la visión y audición.  Sin embargo, son todavía más importantes las observaciones sobre la manera en que su hijo usa su visión y audición en la vida diaria.  Por ejemplo, ¿puede ver la luz, siluetas, objetos brillantes o ilustraciones?  ¿Puede verlo a Ud. cuando entra al cuarto?  ¿Puede oír el sonido de un camión cuando pasa?  ¿Se tranquiliza cuando oye música suave?  ¿Responde a su nombre o a peticiones simples?  Recuerde, toda la información es importante aunque las respuestas de su hijo sean muy sutiles u obvias para Ud.

2.  Déle al equipo educativo información sobre los aparatos de apoyo que usa su hijo para ayudarle a maximizar el uso de los restos de la visión y la audición.  ¿Cuáles son los aparatos y cómo los usa su hijo?  ¿Con qué frecuencia los usa y en qué situaciones?

3.  Ponga atención al ambiente que le gusta o no le gusta a su niño.  ¿Es el niño sensible a los estímulos visuales tales como la luz o estímulos auditivos como sonidos fuertes?  ¿A qué tipo de ambiente auditivo responde mejor su hijo?  ¿Le gustan los juegos de movimiento como columpiarse?  ¿Le gusta pasar tiempo nadando o bañándose?  ¿Le gustan los abrazos fuertes?

4.  ¿Cuáles sentidos prefiere usar cuando está explorando el ambiente y aprendiendo cosas nuevas? ¿Es la visión, la audición o el tacto, o una combinación de estos?  ¿Usa el olfato para identificar lugares, comida y personas? 

5.  Cuando está inquieto, ¿qué actividades hace Ud. con él para calmarlo?  Cuando está encerrado en si mismo ¿qué actividades hace para estimularlo?

Discapacidades Adicionales

Muchos niños que tienen problemas de visión y audición combinados también tienen discapacidades adicionales.

Consideraciones:

1.  ¿Tiene su hijo problemas motores?  ¿Cuál es el equipo especial que usa y cómo lo usa?  ¿Qué tipo de apoyo necesita para moverse o para sentarse bien?  ¿Cuál es la mejor manera para apoyarlo físicamente?

2.  ¿Tiene problemas de comportamiento relacionados con su condición?  ¿Cuáles son las estrategias que se han usado para responder a los patrones de comportamiento de su hijo? 

3.  ¿Tiene su hijo problemas de aprendizaje?  ¿Bajo qué situaciones aprende mejor?  ¿Qué le ha ayudado a aprender cosas nuevas, tales como actividades, conceptos o señas? 

4.  ¿Tiene su hijo problemas de salud o problemas médicos relacionados con su condición?  ¿Está tomando algún medicamento que pueda impactar su nivel de participación en el salón de clase?  Si no come alimentos regulares ¿cuál es su dieta y las metas que Ud. tiene para alimentarlo?  ¿Tiene problemas para la siesta o para dormir durante toda la noche?  ¿Hay factores especiales que el personal de la escuela deba tomar en cuenta en caso de una emergencia médica?

Comunicación

La mayoría de los niños que son sordo-ciegos tienen desafíos con la comunicación receptiva y expresiva.  Muchos tienen dificultad de expresar sus deseos y necesidades, de socializarse, de entender a los demás y de aprender conceptos nuevos en la escuela.  La comunicación es parte de todas las actividades del día y es importante para las interacciones con todas las personas.  Las formas en las que su hijo se comunica posiblemente sean claras o posiblemente deban ser explicadas para que los demás las entiendan.  De le a las personas que le ofrecen servicios la descripción más clara de cómo se comunica su hijo, especialmente las estrategias de comunicación que Ud. usa en la casa.

Consideraciones:

1.  ¿Cómo se comunica su hijo a través del comportamiento?  ¿De que otras maneras se comunica su hijo, con gestos, señas, palabras o con una combinación de estos?

2.  Sea tan específico como pueda cuando comparta información sobre la comunicación.  El sistema de comunicación de su hijo es muy personal, por eso entre más información dé será mejor.

3.  Siempre que sea posible, proporcione información escrita sobre su hijo, ya que es de mucha ayuda.  La información escrita sobre el sistema de comunicación de su hijo puede ser compartida más fácilmente y con más precisión con los miembros del equipo de la escuela.

Las ideas para compartir información pueden variar dependiendo del niño en particular y de sus necesidades.  Lo que he incluido aquí son ejemplos del tipo de información que posiblemente le gustaría compartir con los proveedores de servicio de su hijo.  Los canales de comunicación deben estar abiertos durante el año escolar para que el personal de la escuela sea consciente de la nueva información que puede ayudar a su hijo en la escuela.  La cosa más importante es compartir esta información para que no haya pérdida de tiempo en el progreso de la educación de su hijo.


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